¿Por qué el funcionario no debe «tocar» las redes sociales?



febrero 21, 2022 7:34 pm


Si su equipo funciona bien, la estrategia es clara y su voz está representada, mejor delegar.

¿Por qué el funcionario, político, líder de organización con un equipo de comunicación no debería «tocar sus redes»? Sí, no debería. No quiere decir que las tenga prohibidas.

Todo lo que el político/a quiera decir, lo podrá decir. En la planificación diaria, eso va a estar. Pero tiene que, justamente, ser parte de esa dinámica, en la cual hay que pensar dónde (en qué momento) y cómo (formatos, redes). Se dirá, pero no en cualquier momento o manera.

¿Todo lo que quiera lo podrá decir? Bueno, no todo. Parte de la escucha activa de redes, también nos dirá cuáles son los mejores momentos, los temas, ese sentimiento social. Eso no significa hacer política a la carta, sino usar herramientas profesionales para captar el timing.

«No tocar las redes» o estar a distancia de ellas tiene otras ventajas: en ellas sucede una parte de la conversación, pero no es todo lo que ocurre. Mantenerlas a unos metros de separación permite tener una película más clara de su influencia. Cuanto más cerca, más borrosas.

Por su aspecto emocional, las redes también llevan enojos varios. Algunos genuinos, a veces mejor o peor expresados: enojos de ciudadanos, reclamos, cosas sin resolver. Otras, provocaciones para hacer reaccionar mal a quien está del otro lado. Las respuestas tienen un protocolo, una forma, una evaluación: ¿esto es un reclamo genuino? ¿lo puede tomar alguien para resolverlo? ¿o es una provocación? Si ese político está muy cerca de sus redes, corre el riesgo de cometer errores, responder emocionalmente.

Por supuesto, la voz de esa persona que habla podrá estar reflejada. Existen muchas formas de darle a quien habla, a ese líder, su propia voz, su emocionalidad, su no distancia.

Pero no es pegándose al celular que eso se logra, sino con confianza, creatividad y planificación.